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El mundo del jamón 

Tradición, cultura y todo un referente de la gastronomía española. Con permiso de los quesos y los vinos, el jamón se ha convertido en uno de los símbolos más importantes de la cocina de nuestro país. Un reclamo gastronómico estrella que está presente en las cocinas, los restaurantes y también los hogares. 


Alrededor de este rico manjar hay todo un ritual que ya ha traspasado las fronteras. Desde luego, uno de los platos preferidos para muchos de vosotros como aperitivo junto a un poquito de pan y aceite o como complemento en tu dieta variada y equilibrada. 


En Arcos somos unos enamorados del sabor de este alimento. Sigue leyendo junto a nosotros y descubre el verdadero mundo del jamón y sus variedades. 

Tipos de jamón

Aunque España puede presumir de ser el país de mayor producción de jamón, en otras zonas del mundo también se crían cerdos para el consumo de este alimento. En concreto en Italia, Francia, China, Alemania y Hungría. 

En España el jamón se puede clasificar en dos tipos: jamón serrano y jamón ibérico. El primero se obtiene de los cerdos blancos, mientras que el ibérico es exclusivo de nuestra península por hacerse con carnes con esta denominación. De este último sale el reconocido jamón ibérico de bellota. 

El cerdo ibérico se caracteriza por su alto valor gastronómico y podemos distinguir la calidad de su carne por: 

  • Bellota: es el jamón ibérico de mayor calidad que podemos encontrar en el mercado. Se caracteriza por su exquisito sabor, color y olor. Los cerdos son criados en libertad por la dehesa y se alimentan de bellotas que encuentran entre la naturaleza. 
  • Cebo de campo: es el segundo tras el jamón ibérico de bellota. La diferencia entre uno y otro reside en la alimentación y el lugar de la cría del cerdo. 
  • Cebo: en orden de calidad es el último de la lista. En este caso el cerdo vive ya en granjas exclusivas de crianza y se alimenta de piensos y cereales. Entre todos los tipos de jamón ibérico, este es el más asequible del mercado.

Cómo cortar un jamón paso a paso

El cortador de jamón es un auténtico profesional del corte de este alimento. Gracias a él puedes degustar el exquisito sabor de este manjar. Para cortar jamón serrano o ibérico es indispensable contar con ciertos materiales básicos: 


  • Soporte jamonero: podrás colocar tu pata de jamón para que esté estable y se sostenga tal y como tú necesitas. 
  • Cuchillos jamoneros: son cuchillos específicos que te ayudarán a cortar tal y como tú quieres tapas de jamón. Te recomendamos tener a mano un cuchillo de hoja ancha, un cuchillo jamonero y un cuchillo deshuesador
  • Afiladores: te permitirá afiliar y tener siempre a punto el resto de tus cuchillos jamoneros. 
  • Chairas: ideal para aguzar el filo de los cuchillos y mantener los filos perfectos. 
  • Tablas para cortar jamón: un complemento indispensable en tu cocina para cortar el jamón o previamente a la presentación de este rico plato. 

Ahora que ya conoces cuáles son los cuchillos necesarios para cortar el jamón, es hora de ponerse a ello y aprender cómo cortar jamón ibérico o serrano correctamente. 


  1. Prepara el jamón: para colocar el jamón en su soporte correspondiente hay que tener en cuenta su consumo diario. Si en tu caso vas a comer todos los días, necesitarás colocar el jamón con la pezuña hacia arriba para iniciar el corte por la zona de la maza. Pero si vas a tardar en consumir, lo mejor es que lo coloques al revés y extraigas las primeras lonchas directamente desde la babilla. Colócalo siempre sobre una mesa estable y robusta con una altura cómoda para el corte. Si todavía tienes dudas sobre cómo colocar el jamón en el jamonero, puedes preguntar a los profesionales en jamones de Arcos. 
  2. Pela el jamón: deberás retirar la piel y esa grasa amarillenta de la zona por la que vas a comenzar a cortar. De no hacerlo así puedes resecar la carne y hacer que pierda sus propiedades. 
  3. Loncheado: puedes comenzar a cortar el jamón serrano con total seguridad y comodidad. Utiliza un cuchillo adecuado y realiza los cortes en paralelo y manteniendo el cuchillo lo más plano que sea posible para ti. 
  4. Cambio de lado del jamón: cuando termines por completo ese lado del jamón, tendrás que darle la vuelta y seguir el mismo procedimiento para su corte y degustación. 

Seguro que te has preguntado también cómo cortar una paletilla de jamón ibérica, ¿verdad? Pues lo primero que debes saber es que los pasos son los mismos, tan solo tendrás que utilizar cuchillos algo más cortos y rígidos para poder acceder a la zona de la espátula y el jarrete. 


Cómo conservar el jamón 

Además de seguir los pasos de corte, es importante que cada vez que terminemos de cortar jamón cubrimos la zona con piel y grasa para conservarlo en perfecto estado. El resto del jamón que no se haya cortado también deberá taparse con trapos de cocina o sacos de algodón. Nunca con plásticos que pueden llegar a empeorar su sabor. 


La temperatura ideal de conservación del jamón debe ser entre unos 10 y 18ºC. 


Intenta cortarlas lonchas que necesites en ese momento, así no perderán sus propiedades si sobran. De ser así, puedes utilizar papel film transparente para guardarlas en el frigorífico. Aunque lo ideal es comerlas justo en el momento del corte.

¿Cuál es el mejor jamón de España?

Hay varios jamones ibéricos que se pelean por este preciado título. Los más reconocidos por su sabor son los Jamones Joselito de Guijuelo, los de 5 jotas, los de Sánchez Romero Carvajal y los Jamones Maldonado.